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Impuesto sobre Patrimonio: definición, funcionamiento y novedades en 2024

El Impuesto sobre Patrimonio (IP) es un tributo anual que grava la riqueza neta de las personas físicas residentes en España. Este artículo te ofrece una guía completa sobre el IP, incluyendo su definición, funcionamiento y las novedades introducidas en 2024, optimizada para la keyword "impuesto patrimonio".


¿Qué es el Impuesto sobre Patrimonio?

El IP grava la riqueza neta del contribuyente, es decir, la diferencia entre el valor de sus bienes y derechos y el de sus deudas. Se aplica a personas físicas residentes en España que superen un determinado límite de patrimonio.


¿Cómo funciona el Impuesto sobre Patrimonio?

El IP se calcula aplicando un porcentaje a la base liquidable del contribuyente. La base liquidable se determina restando a la suma del valor de todos los bienes y derechos del contribuyente (como inmuebles, acciones, depósitos bancarios, etc.) el importe de sus deudas.


Novedades en el Impuesto sobre Patrimonio en 2024:

  • Aumento del mínimo exento: El mínimo exento se ha elevado a 3 millones de euros por contribuyente.

  • Reducción de la tarifa: Se ha reducido la tarifa del IP, con un nuevo tipo máximo del 2,5%.

  • Exención de la vivienda habitual: La vivienda habitual queda exenta del IP, con un valor máximo de 300.000 euros.


¿Quién debe pagar el Impuesto sobre Patrimonio?

Están obligados a pagar el IP las personas físicas residentes en España que superen un patrimonio neto de 700.000 euros. No obstante, existen algunas exenciones, como la vivienda habitual, los bienes afectos a la actividad empresarial o profesional y los planes de pensiones.


¿Cómo se paga el Impuesto sobre Patrimonio?

El IP se paga mediante autoliquidación, en el plazo establecido por la Agencia Tributaria.

Consejos para ahorrar en el Impuesto sobre Patrimonio:

  • Planificar la transmisión de bienes: La transmisión de bienes a familiares o herederos puede ayudar a reducir la base liquidable del IP.

  • Aportar a planes de pensiones: Las aportaciones a planes de pensiones son deducibles en la base imponible del IP.

  • Invertir en activos exentos: Invertir en activos exentos del IP, como la vivienda habitual o los bienes afectos a la actividad empresarial o profesional.

Conclusión:

El Impuesto sobre Patrimonio es un tributo importante que puede tener un impacto significativo en la economía de los contribuyentes. Es importante conocer cómo funciona este impuesto para poder cumplir con las obligaciones fiscales y minimizar su impacto.

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